Figura en Rodrígez Marín (1896: 108) junto a otras dos variantes, a las que otorgamos ficha aparte: Hasta el cuarenta de Mayo [/] No te quites el sayo; [/] Y si vuelve á llover, [/] vuélvetelo á poner; o bien: Y si el tiempo es importuno, [/] Hasta el cuarenta de Junio. Sin duda Gomis (1998: 161) bebe de esta fuente: Hasta cuarenta de mayo / no te quites el sayo; / y si el tiempo es importuno, / hasta cuarenta de junio [uns altres hi afegeixen:] y si junio es ruin, hasta su fin.
Figura en Rodrígez Marín (1896: 108) junto a otras dos variantes, a las que otorgamos ficha aparte: Hasta el cuarenta de Mayo [/] No te quites el sayo; [/] Y si vuelve á llover, [/] vuélvetelo á poner; o bien: Y si el tiempo es importuno, [/] Hasta el cuarenta de Junio. Sin duda Gomis (1998: 161) bebe de esta fuente: Hasta cuarenta de mayo / no te quites el sayo; / y si el tiempo es importuno, / hasta cuarenta de junio [uns altres hi afegeixen:] y si junio es ruin, hasta su fin.