En enero los rayos del sol son muy oblicuos y el día dura poco, por lo que apenas asoma si hay un monte cerca. El refrán figura así en Carrusca (1976: 208). En Moreira (2003: 292): Sol de Inverno sempre anda atrás do outeiro. Cf. Sol de Inverno sempre anda atrás do outeiro.
En enero los rayos del sol son muy oblicuos y el día dura poco, por lo que apenas asoma si hay un monte cerca. El refrán figura así en Carrusca (1976: 208). En Moreira (2003: 292): Sol de Inverno sempre anda atrás do outeiro. Cf. Sol de Inverno sempre anda atrás do outeiro.